Me ha resultado muy gratificante que después la enorme desilusión y hastío que me provocó la esperada FLASHFORWARD me encontrase con esta joya.

Se está convirtiendo en una costumbre el quitarse el sombrero cuando te topas con una serie británica. Son únicos. Nadie ofrece tanta diversión, tantos personajes inolvidables, tanta crítica social, tanta mala leche...con tan pocos medios. Me resulta asombroso el firme pulso narrativo de la serie. Sí, son chicos con poderes, pero ésto no es más que una excusa para hablarnos de la amistad y de las dificultades de los jóvenes para relacionarnos en y con nuestro ambiente.

MISFITS se sumerge en las profundidades más inhóspitas de la psiqué juvenil. La grandiosidad de sus guionistas reside en que no traicionan el espíritu de sus personajes. No caen en apestosas moralejas ni en mensajes rancios. Ninguno de los cinco jóvenes protagonistas es de una sola pieza. No todos son los típicos jóvenes pasotas, pero ninguno de ellos es un santo.

Es admirable cómo los británicos saben conjugar perfectamente la ternura con la crudeza, lo macabro con lo hermoso, lo espantoso con el humor más negro. No caen en el típico tremendismo social. Y ésto lo podemos ver en muchas, muchas producciones británicas. Desde las reciente "This is England", pasando por "Full Monty" hasta llegar a cintas como "Kes" o "La soledad del corredor de fondo".

En MISFITS se puede rastrear claramente de dónde procede su materia prima: "Shameless", "Skins", "Héroes", "Corre Lola, corre", "Viento en las velas"...Incluso un amigo me dijo (antes de visionarla) que entronca directamente con una revisitación del clásico Peter Pan.

El caso es que estoy terminando la carrera de Comunicación Audiovisual y ya quisiera poder participar alguna vez en una serie con semejante frescura visual y temática. Todo ello aderezado con una electrizante banda sonora.

Además, al haber muy pocos personajes y al estar casi siempre en grupo, la acción transcurre a toda velocidad por una autopista en la que apenas existen unas pocas paradas de autoservicio, las cuales sirven para cincelar fugazmente y de forma precisa a los personajes. Y rápidamente los guionistas nos vuelven a introducir en el carril de aceleración.

MISFITS es en definitiva una hermosa oda a la juventud desenfrenada. A sus inseguridades y sus miedos, a sus sueños de jolgorio y libertad ¡¡Vamos a cerrar el último After vivo!!

No nos engañemos pensando que Matrix revolucionó el mundo del cine creando un todo de la nada. Lo que realmente convierte a Matrix en una gran película es que ha sabido juntar en solo dos horas el Mago de Oz, Alicia en el país de las maravillas, Grupo Salvaje, El mito de la caverna, la Biblia, la cutura ciberpunk...Todo ello consiguiendo ir un paso más allá de lo ya inventado. Matrix es un gran crisol cultural y artístico que ha demostrado que las películas de acción sí pueden ser inteligentes. Sin duda es una de las películas más entretenidas de la historia del cine.

Es curioso que esta película de Walter Hill es la que más se acerca en cuanto a la ambientación a la historia original. Resulta que la maravillosa "Yojimbo" es una adaptación de mi novela favorita: "Cosecha roja" del gran Dashiell Hammet (Del que también recomiendo "La llave de cristal", una novela que tiene puntos en común con "Muerte entre las flores" ).

"Cosecha roja" contiene diálogos antológicos. Cargados de fina ironía, frescura, masculinidad... Hammet encuentra nuevas y muy eficaces metáforas. Cincela a sus personajes llenos de matices con los adjetivos justos, de forma precisa. Y no contento con ésto, y en medio de La Gran Depresión, los envuelve en una apasionante trama. Todo comienza con un detective misterioso que llega a un pequeño pueblo minero (Poisonville) dominado por dos bandas de mafiosos rivales. Esta premisa no es más que una excusa que Hammet utiliza para mostrar a contraluz la corrupción capitalista y política que imperaba en los EE.UU. en aquella época. Es mi deber advertir que uno en ocasiones uno se puede perder con los nombres de los personajes.

El misterioso Agente de la Continental de "Cosecha Roja" no es un detective al uso. Sí que podría decirse que es un tio duro. Pero, a diferencia de sus versiones cinematográficas, la mejor arma de este misterioso agente es su afilada lengua con una capacidad asombrosa de persuadir y sembrar cizaña. Él sabe jugar todas las cartas con un as en la manga en todo momento. Es decir, prima la inteligencia sobre la artilleria.

Con todo esto dicho sobre la fuente original, quiero terminar diciendo que a mí me gusta esta película. Porque a veces los tópicos funcionan de puta madre para no despegarte del sofá y uno fantasea con ser el duro de la peli y matar a gangsters a cascoporro.

Esta película significa para mí el final de una era: la de los verdaderos vaqueros y forajidos del oeste. Lejos de presentarnos a los típicos personajes cargados de moral y de sentimiento patriótico que hemos visto en numerosos westerns, los héroes peckinpahnianos son verdaderos fuera de la ley. No dudan en sacrificar la vida de inocentes para lograr sus objetivos, puteros y alcohólicos. Pero hay algo que les hace verdaderos hombres: el sentido de la amistad. No les importa nada los crímenes cometidos anteriormente, pero el hecho de traicionar la amistad, les carcome la concienza y ya ni siquiera el alcohol o las putas alivian su dolor.
Son veteranos que saben que su tiempo se está acabando. El progreso está transformando el mundo que conocieron y cada vez les cuesta más sobrevivir en él. Con lo que ya solo les queda hacer una cosa: buscar la redención. Y es que el viejo oeste está muriendo con ellos. Es el fin de una era, los tiempos están cambiando.
Magnífico western lleno de violencia y lirismo con riquísimas metáforas visuales y frases míticas llenas de sabiduria. "Una tragedia shakespeariana a partir de un spaghetti western". Esta película ha ejercido una influencia brutal en el cine actual. Gracias a Scorsese que fue uno de los que presionaron para que la Warner sacase una copia con el metraje original.
Y para terminar, decir que muy pocos montajes son tan buenos como el de esta película. El genial guionista Schroeder le comentó a Peckinpah que el montaje era tan bueno como una cinta de samurais de Kurosawa.
La cumbre del western. Casi nada.

En su momento ya me parecía dificil que una serie tenga como protagonista a un personaje tan dificil de empatizar como Tony Soprano o Dexter. Pero descubrí a otro que es todavía más cabrón y retorcido: Vic Mackey. ¡Y es la hostia!.
Sólo quería decir que esta serie tenga posiblemente el mejor episodio piloto de la historia de la televisión. Para mí The Shield es un hito en las series de ficción al igual que Los Soprano, Deadwood, Twin Peaks...y otras míticas de la HBO o Showtime. Y es que no hay que olvidar que independientemente de su calidad artística, The Shield ha supuesto un gran avance en cuanto a técnicas de rodaje y se ha experimentado muchísimo (con las cámaras ARRI SR3), consiguiendo de esta forma una fotografia brutalmente realista.