LTNIVERSIDAD DE GRANADA
r{OMENAJE
AL PROFESOR
ANTONIOGALLEGOMORELL
GRANADA
MCMLXXXIX
Gabriel Celaya sobre Gabriel Celaya
A pesarde la advertenciaque Celaya comienzahaciendo en su introducción a la segundaedición de In demdsessilencio(1), que un autor nunca es
buenjuez de sus obras,lo cierto es que el vascose ha erigido en juez y parte
desuextensay vana producción literaria.Es más,en la basede su dedicación
a la labor teóricoy crítico literaria late la necesidadde "explicar y explicarse",
convirtiéndose
su discurso crítico en un discurso íntimamente relacionado
con su trayectoria literaria hasta el punto de que no es aventurado afirmar
quesin éstano hubiera sido posible la otra. Por tanto, lo que nació de una
necesidad,
de una comprometidanecesidadde "explicar y explicarse",de dar
"razón
su
narrativa", ha pasado a desempeñaruna nueva función, que no
anulala primitiva, absorbiéndolay ampliando su marco más allá de lo que el
escritorvascohubiera previsto,probablemente:su discurso"explica" a otros
poetas,
explica todo un período literario y las relacionesideológicasde un
momentohistórico, es decir, muestra no sólo lo que se habla y de qué se
habla,sino también el "lugar" desde donde se habla
Voy a ocupanne en esta ocasión de las publicacionesy textosen los que
GabrielCelayahabla de sí mismo, sin que por ello pierda de vista el sentidoa
queacabode hacer referencia.En concretoson: trescartasabiertasen las que
eldonostiarasevio obligado a explicarse:la titulada,por el periódicoseguramente,"(Jna carla de Gabriel Celaya y un punto sobrela i" (2),"Carta abierta
a CarlosMurciano" (3) y la que, bajo el malintencionadotítulo puestopor la
( l ) Madrid, Turner, 197Q,p.7.
(2) Ilnidad, San Sebastián,9 de abril de 1952.
(3) Insula, 180,Madrid, noviembre, 1961,p. 3.
312
ANTONIO CHICHARRO CHAMORRO
dirección de la revista La Estafeta lüerqria, apareció como "IJna teoría del plagio: el equipo" (4); una carta inédita, que tuve ocasión de hacer pública en mi
tesis doctoral (Universidad de Granada, l98l), donde reflexiona sobre los elementos vascos de su poesía (5); un artículo "Doce años después" (6); y, finalmente una serie de prólogos, introducciones y notas, puestos a las reediciones
de algunas de sus obras'. Las cartas boca arriba (7), Cantos iberos (8), Lo demás
es silencio(9),De claro en claro(10),El derechoy el revés(11) -estos son libros
de poesía -; Poesía urgente (12), Dirección prohibida (13), Pane de guena (I4), Et
hilo roio (15), Itinerario poético (16) -volúmenes antológicos-; Tentativas(17)
y Memorias inmemoriales(18) -producción en prosa. Por otra parte, algunos
prólogos más, con ser importantes como reflexiones sobre su producción y
trayectoria, han sido esfudiados en mi citado trabajo por su interés teórico.
Me refiero concretamente a su artículo "Notas para una Cqntata en Aleixandre"
y a sus prólogos, de interés para conocer la poética de la poesía social, "Digo,
dice Juan de Leceta", "Poesía eres tú" y "Nadie es nadie". Por último, un artículo que publicó Celaya sobre sus heterónimos es estudiado en trabajo apart e ( 19) .
Este conjunto de publicaciones da entrada a reflexiones globales sobre su
trayectoria como en "Doce años después", donde reflexiona sobre la poesía
desde un punto de vista teórico esencial, punto de vista teórico que viene a
asegurar la estimación y consumo de su obra poética. Así, define lo que es/
debe ser la poesía, reivindicándola como una actividad inmersa en un aquí y
ahora; lucha también en contra de la poesía hermética y minoritaria a través
del prosaísmo, en un plano teórico esencial, como he dicho.
En 1975publicó nuestro autor una antología de su obra. Itinerario poético,
donde ofrece una introducción bibliográf-rca que es la más importante refle(4) La EstafetaLiteraria, 366. Madrid. marzo. 1967.
(5) La carta está fechada en Madrid. el 2l de febrero de 19g0.
(6) Acento Cultural, 3. Madrid, enero. 1959.pp. 11.-20.
(7) Madrid, Turner, 19742,pp. 9-12.
(8) Madrid, Turner, 19752.pp. 9-10.
(9) Madrid, Turner, 197G. pp. j-9.
(10) Madrid, Turner, 19772.pp. 7-8.
(ll) Barcelona,Llibres del Sinera.1973."Ocnos".p. 9.
(12) Buenos Aires. Losada. 1960.pp. 7-8.
(13) Buenos Aires, Losada. 1973.pp. 7-8.
(14) Barcelona.Laia, 197j, pp. 7-10.
(15) Madrid. Alberto corazón Editor. 1977."visor de poesía".pp. 7-g.
(16) Madrid, Cátedra,1975.pp. lt-37.
(17) Barcelona,Seix-Barral,19722.
p. 7.
(18) Madrid, Cátedra,1980,pp. 5l-55.
(19) Vid. "Heteronimia e ideologíasestéticas:Fernando Pessoay Gabriel Celaya", de quien
csto escribe. cn Homenujc u Cuntoens(Esrutlio.s.),
El.r¿¡.r,¿¡.s
Hispano-portugueses),
Granada. Universidacl cle Granad¿r.l9tt0.pp. l-11-149.
CELAYA SOBRE CELAYA
373
xión global sobre su vida y su obra publicada hasta este momento. Dicha
introducciónes dividida en cuatro grandes apartados,a los que remito, que
titula: "Ficha", "Tentativas", "Nofte" y "[.lltima hora".
Otros interesantestextos son las cartas. Dos de ellas nacieron como
defensafrente a ataquesmuy determinados.La primera, la tinllada "IJna
cartade Gabriel Celaya y un punto sobre la i", es una protestapor haberse
relacionado
y cucañistaspemanes"
a Celaya con "octogenariosbenaventeses
en el diario Unidad,de San Sebastián,con motivo de una "Fiesta de la poesía".La segundatiene como origen a su vez una carta abiertade JoséMiguel
Moreiras,"Vasco y chino" (La Estafaa literaria, 362, 28 de enero de 1967),
dondeda a conocerlas semejanzasentreunos versosde Celayay un texto de
'an (siglo
Chin Shengt
X\[II de la era cristiana).Moreiras remite al llbro La
importancio
de vivir (20)y al de Gabriel CelayaDe claroen claro,en los que hay
coincidenciade tírulos y de motivo argumental,"Momentos felices de un
chino" y "Momentos felices".El firmante de la carta termina estableciendo
minuciosay exhaustivamentelos puntos comunesentrelos textos.Celayarespondió con una larga carta que, como era habitual en La Estafetaliteraria,se
publicó precedida de una nota de la dirección en la que la detracción del
vascoy del marxismo es patente.Celayadice que, al pie de la letra,Moreiras
tiene razón,pues el texto de Chin Sengt 'an le impresionó cuando lo leyó.
Mucho tiempo después,Celaya escogiófragmentos,los varió y los convinió
en algo que no se parece en nada al texto que lo motivó. La carta continúa
cuestionandolos conceptosdecimonónicosde originalidad y de plagio en la
medidaen que tienen que ver mucho más con el individualismo que con la
autenticidad.Finalmente exponesu teoría sobrela poesíaen equipo,citando
a San Juan de la Cruz.
En la carta inédita reflexiona sobre los elementosvascosde su poesíay
concluyeen que estosson: 1) Su poesíasiempretiene algo de espontáneoe
inmediato;2) Cuando un bertsolari canta siempre se dirige a otro y debate
con él: en su poesíahay tendenciaa establecerun coloquio o debate;3) Su
lenguajees siempreliso y llano como el de los bertsolarisque tienden siempre
al prosaísmoe incluso a la burla y al humor.
El segundogrupo que he establecidoes el que se ref,rerea las publicaciones en las que toma por objeto de reflexión algunos de sus libros. Así, la
segundaedición de Las cartasbocaaniba es abierta con una "Noticia", donde
aludea su situaciónen la más inmediatapostguerra-autarquía cultural,pérdida de contacto con el mundo exterior, fundación de su editorial "Norte".
etc.- y explica su intento de fundir su estilo con el del destinatariode cada
carta,persiguiendosumirse en lo otro "más que racionalmente".
(20) De Lin Yutang, publicado en Buenos Aires, Sudamericana,lg4gr3,y en el que transcribe "Momentos felicesde un chino", de Chin Sengnt'an,pp. 195-199.
La edición que conoce
Celaya es la de 1944,según expone en la carta.
374
ANTONIO CHICHARRO CHAMORRO
"Nota" titula las palabras preliminarescon que abre Cantosiberosen su
segundaedición, afirmando que estelibro fue escrito en los años de mayor
furor y esperanzapor lo que es el libro más calculado para producir un
efecto,tanto por su técnica -versos martilleantesy oxítonos- como por su
temática -la problemáticade España- que no es sino cuestión ibera.
La segundaedición de Lo demásessilencioviene precedidapor una interesanteintroducción en la que juzgasu libro como el más importante,al coincidir susproblemaspersonalescon un problema colectivo:"¿,Existencialismo
o
marxismo?",lo que hizo posible que tocara estetema de un modo íntimo y a
Ia vez social.
El prólogo a la segundaedición de De claro en claro es importante no sólo
por lo que dice de estelibro, sino también por sus reflexionesen torno a la
cuestión hombre/poeta.lo que explica de alguna manera que nuestro autor
señalelas circunstanciasque estuvieronen la basede estelibro y que incidieron en su transformación poética.
El derechoy el revéses introducido mediante una "Nota" en la que el
donostiarraexplica el "argumento" de esta nueva cantata,basadade alguna
forma en la fábula de Prometeo y Epimeteo.
La buenqvida (21) es uno de los libros que Celaya interpretaen una carta
abierta, obligado por el artículo "La buena vida, de Gabriel Celaya"(22),
escritopor Carlos Murciano. Este crítico comienza su artículo reflexionando
sobre el tema de Lázaro y continúa tratando acerca de los personajessímbolo,para terminar afirmando que, aunque el poema tiene aciertos,conforme se va avanzandocrece la confusión: óQué pretende el poeta?¿Quéha
querido decir?¿Quésimbolizan estasfiguras?El poeta responde:suspersonajes no son contrafigurassuyasni símbolosde nada. El juego dialécticoentre
el Doctor, que cree en el más allá, y Lázaro, que al volver de la muerte dice
que más allá no hay nada, conduce a la conclusión de que debe vivirse sin
recurrir a estas alusiones.
Por lo que respectaa los prólogospuestosa publicacionesantológicas,el
primero es el que, titulado "Nota", puso a su Poesíaurgente,en el que explica
el sentidode su etapade poeta social no ignorando para ello los precedentes:
desdeel surrealismoy prosaísmoexistencialhastallegar a la poesíasocialy
con ella a la inmensa mayoría, para lo que deberán adoptarse,afirma, los
recursostécnicosy transformarla sociedad,única manera de lograr el acceso
a la culfura por parte de esa mayoría.
Direcciónprohibida (1973),según expone también en una "Nota", recoge
aquellas publicaciones que no pudieron incluirse en sus Poeslascomple-
(21)
(22)
Santander, La Isla de los Ratones. 1961.
Poesía Española, 104, Madrid. agosto, 1961.
)
CELAYA SOBRE CELAYA
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tas(23):Las resistenciasdel diamante, un largo poema en el que se cuenta la
fugapor la frontera hispano-francesade cuatro miembros de una célula del
PCEdescubierta.Incluye también Poemastachados,poemas de muy diversas
épocasprohibidos por la censura, EpisodiosNacionalesy Cantata en Cuba.
Una "Nota", más amplia que las comentadas,abre Partede Guerra,antologíade suslibros censuradosy de poemas sueltosperdidos o traspapelados.
Estaspérdidas,poco significativaspara la "alta literatura",son un síntomade
la humillación del poeta ante la censura.
En el prólogo de El hilo rojo Celaya justifica sus poemas netamente
político-sociales,
así como el porqué de la edición de los mismosen estevolumen.Por lo que al título respecta,afirma que se lo sugirió un texto de Engels
en el que hablaba del "el hilo rojo" que atraviesatoda la historia y sirve de
guía a quienes quieren comprenderla.
Sobresus libros en prosa ha escritomuy brevesreflexionestambién. Así,
de Tentativcrexpone que era para él un libro abierto en el que debían irse
sucediendociclos. Al terminar el cuarto e iniciar el quinto, "Tentativas mínimas",éste por la forma que adoptó terminó por convertirse en la novela
Mzaro calla (1949\.
Y llegamos,para terminar ya con esta brevísima descripción,al prólogo
del libro Memoriasinmemoriales,libro con el que pretende tomar conciencia
de lo que ha hecho y buscarle un sentido a lo que tal vez no lo tenga. Más
adelante,juzga las confesionesal uso como un acto de insinceridad,por lo
queinsisteen la importancia del sentidode los hechosmás que de los hechos
en sí, que suelenser protagonistasde diarios y textos similares.El sentido del
quehabla nuestro autor es el que trasciendela vida elemental: susMemorias
inmemoriales,
es el caso, que dan de lado el realismo anecdótico y que son
prototípicas más que subjetivas.
A la hora de iniciar el análisisde estas'publicaciones,
mi primera tareava
a consistiren aislar esa visión global que Celaya poseede sí mismo. Posteriormente,analizaré el sentido de esa lectura y sus contradiccionesinternas,
deteniéndomeal mismo tiempo en los presupuestosteóricosque esaspublicaciones"muestran".
Gabriel Celaya resume su trayectoria ideológico-estéticaen las siguientes
etapas:durante los años treinta fundamentalmente,participa de una concepción del mundo surrealista;tras la guerra y ya en plena postguerra,rompe con
el surrealismo,dándosepaso así al existencialismodesdeel que, contradictoriamente,evoluciona al mamismo que, como ideología,dice no abandona
nunca.A partir del momento -comienzos de los sesenta- en que entra en
Q3) Madrid, Aguilar, 1969.Hay una nota en la página 34, enla que se lee: "Se ha prescindido en estevolumen de los poemas propiamente épicos (I-as resistencias
del diamantey Episodios
y dramáticos(Víasde agua)",sin más referenciasa las causasde su exclusión:la proNacionales)
hibición por la censura.
376
ANTONIO CHICHARRO CHAMORRO
crisis la poesía que el marxismo procura,ha recorrido diversos caminos poéticos e ideológicos que pasan por una ruptura con el humanismo y una vuelta
al nihilismo con que comenzó. Estas posiciones ideológicas han generado
distintas prácticas literarias que en muchos momentos se han presentado
contradictoriamente: así tenemos, resumiendo, una poesía surrealista, la poesía social (existencialismo-marxismo) y una poesía "personal" (desde los años
sesenta en adelante) que ie ha llevado a recorrer diversos caminos: desde una
vuelta a los orígenes hasta el experimentalismo, pasando por otras numerosas
prácticas y retomando a veces la poesía social. Esta es su visión global.
Por otra parte, esta trayectoria ideológica le ha llevado a ofrecer en determinados momentos datos biográficos concretos con los que sentar sus afirmaciones. Conviene insistir en que su información biográfica no se limita a
los meros datos, sino que realiza una interpretación y valoración de los mismos en función, como digo, de su trayectoria de escritor. Así, sus palabras
sobre su infancia y adolescencia, señalando su origen social, educación recibida, causas de sus comienzos en la escritura, vida cultural y lecturas e
influencias recibidas; así, la mirada a su incipiente madurez el trabajo obligado frente a la dedicación literaria, abriendo un paréntesis por lo que a los
años de la guerra civil respecta(24); así su trayectoria durante la postguerra:
soledad en la soledad autárquica, nueva enfermedad, las primeras publicaciones y "Norte" juirto a Amparo Gastón, el encuentro con la calle, la lucha política, ruptura con el trabajo y con la familia, el traslado a Madrid, etc. A partir
de los años sesenta, su información biográfica, salvo en lo que respecta al
abandono del marxismo ortodoxo y militante, es la información de sus libros.
Su biografía parece reducirse a su actividad literaria, lo que es una manera de
unir aquello que teóricamente ha separado una y ofra vez'. la literarura
y la vida.
Esta visión general de su trayectoria, que hemos aislado a partir de las
publicaciones descritas, no ha sido negada por nuestro escritor en otras ocasiones posteriores. Así, en dos entrevistas vuelve a manifestarse al respecto.
E,n la entrevista mantenida con el poeta por Jorge Cela, afirma: "Resulta que
las etapas de mi poesía están muy definidas. Podría decir: surrealismo, existencialismo, poesía social y poesía personal, en la que estoy en este momento.
Cuando pienso que de alguna forma me empiezan a reconocer un poco" (25).
En este mismo sentido se manifitesta, aunque más extensamente, en una
(24) Vid., ni trabajo "Noticia biobibliográfica de Gabriel Celaya (1911-1950)". en: Estudios
Romanicos dedicados al profesor Andrés Soria Ortega, Granada, Universidad de Granada, Departamento de Filología Románica, 1985.pp. 117-133.
(25) "Gabriel Celaya. sólo poeta",Nueva Estafeta,3. febrero, 1979.p.60. En este mismo sentido se manifiesta en una entrevista publicada por Heraldo de Aragón, Zaragoza, 28 de
marzo de 1972.
¡
CELAYA SOBRE CELAYA
317
publicada por el diario madrileño El País(26).Ahora bien, lo que
entrevista
no quedaclaramentedicho en sus publicaciones,aunque evidentementeallí
sepuedereconstruir,es el objetivo último de toda su poesía.Por eso,no está
de más conocer,segrin él mismo, la razón última de su quehacerpoético,
razónestaque enhebra todas las etapasy concepcionesmantenidas:"A lo
largode la vida he pensadola poesíade muy diversasformas,pero la razón
últimay principal de mi trabajo ha consistidoen intentar salir de la soledady
comunicannecon la gente.Es la poesía,también, un modo de hablar diferente,pero que necesitasiempreser escuchada.No importa que el otro esté
lejano,ausente,que sea de otra época,que sea un lector que aún no haya
nacido.Poesíaeres tú, el otro, un contacto ajeno al tacto" (27).A continuación,la respuestaadquiereun rumbo que contradicede alguna maneradeterminadoscomentarios sobre sus libros y que, por otra parte, reafirma las
posicionesmantenidaspor Celayasobreestacuestiónen Inquisiciónde la poesía(1972).Siguediciendo:"Tampoco vale explicar.Hay que evitar la maestría,
la docencia.Sugerir,sólo eso,sugerir...,que el otro ponga tanto como tu. Una
comunicaciónen la que todos tienen que comulgar".
Tras esta reconstrucciónde su trayectoria global, rastrearésus críticas.
Estamosen 1952.Justamenteen el día 9 de abril. Esedía el periódicoguipuzcoanoUnidadpublica una carta abierta del ingeniero-poeta.iCuál es el interésde dicha carfa?Dejar en claro las posicionespoéticaspor las que Celaya
atraviesaen esosmomentos,la poéticadel realismosocial,y mostrarla lucha
ideológicaque enfrentaa los poetasespañolesen aquel momento.La lectura
queCelaya realizade sí mismo entonceses la que lo da como poeta social o
real o comprometido.Asimismo, puede verseya en el plano de sus teorías
cómo actúa entre líneas su concepto de la poesíacomo poesía auténtica o
real,lo que presuponela existenciade una poesíainauténtica,falsa o ideológica,una poesíaque, como la de la "Fiesta de la Poesía"que critica, es "antipoética":"La poesía -dice- en que nosotroscreemos,libre de hisopazos,
proteccionesy propagandismoordenado,vive y vivirá siemprede espaldasa
cualquier intento de falsificación".
"Doce años después",publicado en 1959,es abierto significativamentecon
una cita de un poeta-símbolo,Antonio Machado. Su importancia radica en
que la elaboracióndel mismo ratihca la validez de sus trabajos teóricosno
sólo como tales trabajos propiamente de teoría de la poesía,sino también
como trabajosde utilidad crítica en el caso concretoque nos ocupa: Gabriel
Celaya.Esto por la sencilla razón de que antesque su prácticateórica,existía
su práctica poética. No extraña, por tanto, que Gabriel Celaya recurra a
(26¡ "Gabriel Celaya:'No soy sólo un poeta social"' (entrevistade Rosa M." pereda
). El país/
Libros, 40, Madrid, 27 de julio de 1980.
(27) Vid., nota 25.
378
ANTONIO CHICHARROCHAMORRO
reproducir una serie de trabajos, previamente publicados, para explicar doce
años de su quehacer poético, doce años de su poesía "real". Para que se hagan
una idea cabal de mi afirmación, voy a entretenerrne en señalarles la procedencia de las partes que constituyen el artículo: reproduce el prólogo con que
ese mismo año abría Poesíay verdad (papelespara un procesol (los ocho primeros párrafos del artículo), en el que rech azaba las concepciones metapoéticas
y reivindicaba una aproximación concreta a este quehacer del aquí y del
ahora; incluye, parcialmente ahora. algunos párrafos de las introducciones a
los artículos sobre poesía coloquial y poesía social, asimismo incluidos en la
primera edición de su libro citado anteriormente (párrafos l0-1a); ofrece fragmentos de su "Respuesta a El Coneo Literario" (1952) (párrafos 16-23), de
"Carta a José García Nieto" (1956) (párrafos 27-31),articulándolos con breves
comentarios escritos para esta ocasión (párrafos 9, 15 y 2$. Como ahrmaba
más arriba, este artículo tiene validez teórica y crítica, al par que muestra el
origen concreto de la faceta de este escritor que ahora nos ocupa. De ahí que
esta mezcla de reflexiones aparentemente caótica, que se extienden a lo largo
de una década o, para ser más exactos, a lo largo de una docena de años,
tenga un sentido específico. "Doce años después" es algo más que un
"refrito", es un resumen de Poesío y verdad (papelesparo un proceso/ 1o que
quiere decir: un resumen de su poesía y vida. Doce importantes años de su
poesía se dan cita aquí, doce años de su trayectoria histórico-vital. que al ser
explicados, caracterizados y justificados dejan al mismo tiempo el "hueco"
por donde podemos ver los anteriores años en que no era poeta real. esto es.
años en que su poesía no era poesía auténtica o real o comprometida. Celaya
explica más de doce años de su quehacer poético. Está explicando todo su
quehacer poético. Está explicando todo su quehacer poético hasta justamente
la aparición del artículo, enero de 1959.
Por otra parte, quiero hacer hincapié en la utilización que nuestro crítico
hace del adjetivo "real". El empleo del adjetivo "social" aplicado a la poesía.
por ser una utilizacíón meramente tautológica y por las connotaciones peyorativas que sustentaba, como consecuencia de la lucha ideológica que enfrentaba a los poetas, fue rechazado en múltiples ocasiones por Gabriel Celaya.
de las que este artículo es una más. En su "Carta a Alfonso Canales" (Cara'
cola, 29 de marzo de 1955)anunciaba la necesidad de reflexionar en torno al
concepto de poesía real. Pero esta reflexión teórica, con tal nombre. no llegó
nunca. E,stacircunstancia no evitó que dicha concepción informulada existiera realmente en otro plano, el plano de su práctica poética. Y así es. esta
concepción de la poesía y del poeta operó efectivamente.Así. que en su artículo afirme: "Mi prehistoria es tan larga como la de cualquer otro hombre.
Pero mi pequeña historia de poeta real sólo comenzó hace doce o trece años".
tiene el sentido de toda una formulación teórica en regla: ser poeta real. escribir poesía real es comprometerse con la realidad, buscar la eficacia expresiva.
L
CELAYA SOBRE CELAYA
379
cambiarla sociedad,darsea los demás:todo lo que ha venido apuntando en
su artículo "Doce años después".
La brevedadno le resta importancia al prólogo escrito por Celaya para
Poesía
urgente(1960),volumen que recoge,como sabemos,sus libros de poesía
socialmás conocidos.La importancia le viene dada especialmentepor sus
reflexionesen torno a la solución del divorcio entre el poeta y el público todavía irresuelto,amén de por no ignorar, para la comprensiónde la poesíaallí
reunida,las etapasque han precedidoa la de su poesíasocial:el surrealismo
y e l p r o s a í s m oe x i s t e n c i a ls, i e n d oe s t aú l t i m a u n t r á m i t e p a r a l l e g a r a l a
inmensamayoría.Por lo que respectaa esteproblema,nuestrocrítico y poeta
rechazapor inüable una solución estrictamentelitera,'ia y reclama la importanciade los medios técnicosde transmisión oral para solucionar esta incomunicación,sin ignorar la necesidadtambién de una revolución social.Y es
aquídonde resideel mayor interésde su planteamiento:la solución no descansaúnicamente sobre los medios técnicos,tal y como dará a entender
alguntiempo despuésen otros trabajos.Por otra parte, su "Nota" contiene
unareafirmaciónde su tesissobrela poesíacomo instrumentode transformaciónsocial,si bien ahora da a entendersu comprensiónmás exactade lo que
suponeel "transformar" al que había aludido ya en los comienzosde los años
cincuenta.Hay en esteprólogo una asunción más conscientede su responsabilidad como escritor,al mismo tiempo que es una muestrade cómo intenta
hacerfecundala lectura de sus libros, mostrandoal lector el norte de su producción.Este es uno de los textosque alcanza el mayor grado de consciente
compromisosocial.No estaríamuy lejos,sin embargo,el comienzo de la crisis de todos estosplanteamientos,de toda la poesíaque había llenado una
docenade años de vida literaria y política española.
Una de las primeras interpretacionesque ofrecede un libro suyo es la que
hace de La buena vida en su carta abierta dirigida a Carlos Murciano
(noviembrede 1961).Susreflexionesal respectoson interesantes,
porque ofrecenen bruto algunasde susconcepcionesbásicasacercade la poesíaque teoizará en su momento. En primer lugar, señalael caráctertransparentede la
obra,pesea las dificultadesde comprensiónde algunoscríticos;en segundo
término,destacael carácterplurisignificativode la misma; en tercero,resalta
el carácterdramático del poema y no sólo porque en él intervenganpersonajes: toda poesía es representaciónsocial bien porque contenga personajes
bien porque contengael personajedel poeta:la función poética.Finalmente,
sobresalesu intención de elaborar estepoema como una especiede poema
radiofonicodestinadoa la recitación,lo que es prueba concretade su búsqueda constante de la eficacia comunicativa, de búsqueda de una buena
forma que solucioneel problema que a él le preocupaexcepcionalmente,
pensandoen la utilización de los mediosdisponiblesde transmisiónsonora.Pero
esto sólo fueron intenciones.
Í
380
ANTONIO CHICHARROCHAMORRO
En 1967apareció publicadala carfa de Gabriel Celaya en la que se defendía de la acusación, más o menos velada, de plagio formulada por Moreiras
en su artículo-carta "Vasco y chino". Aparte de las informaciones concretas
que expone al respecto,es significativo el hecho de que insista con cierto detenimiento en unas reflexiones que pretenden dar al traste con el mito de la originalidad y de lo que éste conlleva. El rechazo de la ,rriginalidad poética lo
sitúa Celaya en el polo ccntrario: lo colectivo, lo social, eje sobre el que elabora sus explicaciones. En sus primeras reflexiones teóricas sobre la poesía
social, ya aparecía un apunte de lo que luego frataria a propósito de la poesía
carmelitana, siendo teonzado detenidamente en uno de los últimos capífulos
de su Inquisición de la poesía. E,s esta una de las ocasiones en que con tanta
contundencia como oportunidad dehende el carácter de creación colectiva de
la poesía.Tampoco podemos olvidar que esta cuestión ocupa algunas páginas
de su GustavoAdolfo Bécquer(1972), en donde la originalidad es considerada
no un valor, sino un demérito. En dicho trabajo se lee: "Y porque el valor de
un escritor se mide por su capacidad de asimilar a otros y hacerlos suyos en
un crisol dentro del cual el propio fuego los fundirá después en algo distinto
de todos ellos y tanto más vivo cuantas más experiencias se hayan integrado"
(pp. l3-14). No podemos perder de vista el hecho de que conciba lo colectivo
en un sentido universal, más allá de unas fronteras político-sociales,y en aras
de una verdad: la poesía.
De su "Nota" a la segunda edición de Tentotivas-ésta sí una nota- solamente destacar su mínima explicación de la otra cara del tapiz, explicación
que se verá enriquecida en la introducción a ltinerario poético, donde ya se
mira elhaz y el envés de la obra. ofreciendo una de las más minuciosas interpretaciones que ha hecho de algunas de sus obras.
En su "Nota" a Dirección prohibida (1973) se limita a hacer una presentación de los libros y poemas contenidos en dicho volumen. Pero de uno de
ellos, de Las resistenciasdel dianlonte, explica algo más: explica el "argumento"
basado en un hecho real. Esta manera de proceder por parte de Celaya, pese a
que su poema sea un poema épico, lo que es un síntoma de esa constante búsqueda de la ehcacia expresiva para la que ahora retoma un género tradicional, no pierde el carácter de función o representación poética: "En
contraposición a cuanto vengo diciendo -afirma en Inquisición de la poesía
(p. 250)-. y de acuerdo con la tradicional división de los géneros literarios
-épica, lírica, dramática- suele decirse que el poeta épico se mantiene en
una actitud impersonal y presenta objetivamente los personajesy sucesosde
su obra. No hace falta señalar, pues es obvio, que en realidad estamos ante
una representación dramática (...) todo es, pues. teatro, y dramáticamente se
efectúa la transmisión poética". No hay contradicción interna en sus planteamientos. Donde, en cambio, si creo existenteuna contradicción es en la explicación del hecho real que ha servido de punto de arranque del poema, ya que
este hecho "ha sido trascendido poéticamente". y bien señalaba Celaya que
I
CELAYA SOBRE CELAYA
381
no sepodía apelar,a la hora de explicar un poema a circunstanciasque estuvieran fuera de él: "Retrocedera ellas -dice- es desconocerla intención
fundamentalde la creaciónpoética"(Inquisiciónde la poesía,p.251). Hay que
reconocerque nuestro crítico no interpreta el poema en base a estedato, pero
sí lo ofrece al lector a manera de "clave", dirigiendo así su lectura y procurandoun consumodel poema más político que poético-no en balde fue uno
de suslibros prohibidos totalmentepor la censura-. No digo que estolo per-estamos en 1973y Celayacomienzaa estarde vuelta
sigaconscientemente
de muchas cosas-, pero inconscientementeparece pretenderlo.
La contradicción que acabo de señalarlesestápresentetambién en otros
prólogos.Es el caso de su "Noticia" a Las cartasbocaaniba, segundaedición,
y de su prólogo a la también segundaedición de De claro en claro, si bien en
esteúltimo caso de una forma especialmenteinteresante,por cuanto no sólo
sehace,sino que se dice -se reflexiona- y sehace:se apelaa las circunstanciashistórico-vitalespara comprenderel sentidode sus poemas.Otros aspectos que destacande su prólogo a la nueva edición de su libro de l95l son los
que siguen:la explicación del sentido global de sus cartas,un sentido históricoen estecasopara Celaya:conectarcon determinadosdestinatarios-poetas
queseguíansu mismo camino. Por eso,tanto muestrano enseñanlos contactosmantenidoscomo aquellosque, por las razonesque fueran, no llegaron a
realizarse.
Por otra parte,Celayaexplica su técnicacreadoraque es un reafirmarseen sus tesis sobre la originalidad y sobre la comunicación poética.
Puedeverseen Inquisiciónde la poesíacómo Celaya ha dejado resueltateóricamentela cuestiónhombrelpoetao poesía/vida,existiendouna contradicción entre esta publicación y el prólogo a la segundaedición de De claro en
claro,donde replantea de un modo muy concreto sus tesis sobre el particular.
El hecho de que señaleesteproblema tiene un interésbásico,pues por estos
añosnuestropoetay crítico parecehaber entradoen una crisis que afectasorprendentemente
al humanismo que siemprelo ha caracterizado,aunque no
hay motivospara alarmarse.De ahí que esteproblema tengaun efectomultiplicadorque nos alcanzadirectamente.Convienetener en cuentasusrazonamientos al respecto: Celaya parte de la duda acerca de la legitimidad de
apelara las circunstanciasbiográficasa la hora de prologar su libro, para reafirmarsemás tarde en su tesishabitual de la debida separaciónque debeexistir entre el hombre y el escritor, entre su vida y su obra. Ahora bien, más
adelante,y rechazando la "nueva crítica", expone: "Pues, pese a todos los
pesares,
ino hay algo común entreel hombre y el autor?".Efectivamente,para
Celayásí lo hay. De ahí que nos recuerdesus circunstancias.De ahí que se
muestrecontradictorioal hnal mismo de su prólogo.Creo que es esteúltimo
Celayael que más se aproxima a la realidad, pues, aunque no deja de ser
curiosasu concepciónde la función poética,no puede separarsela obra de
quien la produjo, en tanto que su autor, un ser histórico, ha dejado en su
382
ANTONIO CHICHARRO CHAMORRO
escritura su inconsciente ideológico, unas relaciones ideológicas determinadas que lo atraviesanal ser un nudo de la red social.Se separaen que la obra
dice más de lo que pensó o lo que ni siquiera llegó a pensar su autor. Por eso,
para explicar, que no leer, una obra hay que acudir a quien la produjo, pero
entendido como un portador-hacedor, un productor-reproductor de unas
relaciones socialesdeterminadas.
Su "Nota" a Cantosiberosmuestra cómo Gabriel Celaya había procurado
utilizar su poesía como un instrumento eftcazde transformación social, elaborando una buena forma con la que comunicarse con la inmensa mayoría
eftcazmente.Sus teonzacionessobre las buenas formas que expone en Inquisición de la poesíatienen un precedenteconcreto en la elaboración de este
libro. Estas reflexiones últimas de Celaya muestran además el carácter poco
ingenuo de estetipo de poesía,por cuanto no esuna poesíaproducida sin técnica ni esfuerzocreador,como alguna crítica hace suponer.Es éstauna poesía más elaborada de lo que comúnmente se piensa(28).
La introducción a ltineario poéticoes la reflexión general más importante
que Celaya efectuade sí mismo, donde se enfrenta,con un espíritu autocrítico
poco común, a toda su trayectoria poética. El procedimiento crítico seguido
alterna la información biográfica con la refleúón teórica que retoma de otras
publicaciones, justificando así sus concepciones de la poesía, y la
justificación-interpretación crítica de alguno de sus libros. Resulta curioso
comprobar cómo va más allá, en su breve comentario de los libros, de los
libros mismos,remitiéndosea la específicasituaciónpersonalpor la que en el
momento en cuestión atraviesa,con lo que tenemos en estado práctico una
negación de sus teoizacíones sobre la cuestión hombre/poeta. Se echa en
falta asimismosuspalabrassobresu peripeciavital y literaria a lo largo de la
guerra civil española(podemossuponerlas razonesde porqué introduce este
paréntesis).Por otra parte,y pesea haber señaladolas influenciasrecibidasy
pesea haberseubicado en el panorama de la poesíaespañolacontemporánea, no hace referenciaa su relación con la llamada "generación del 36" (29).
La segundaedición de I-o demósessilenc¿oviene precedida de una introducción en la que Celaya explica el argumento de la cantata,que valora muy
especialmenteen relación con el resto de su producción, porque en dicho
libro sus problemas personales-la cuestión existencialismo/marxismo-
(28) Vid. mi "Notas sobre prosaísmo y retórica en la poesía social española". en: M. A
GARRIDO GALLARDO, ed., Crítica semiológicade textosliterarioshispánicos(volumen II de las
Actas del CongresoInternacional sobreSemióticae Hispanismo celebradoen Madrid en los días
del 20 al 25 de junio de 1983),Madrid, C.S.I.C., 198ó,pp. ffi3-617.
(29) Sin embargo, en 1965.en la revista Insula (núm. doble 224-225)se había manifestado al
respecto,afirmando que no estabade acuerdocon estaetiqueta,ya que. tras la guerra,los pertenecientesa aquella promoción -que no "generación"-. optaron por unos caminos distintos y
algunos incluso murieron.
CELAYA SOBRE CELAYA
383
coincidieroncon un problema social.Esta manera de justificar el interésdel
libro es un tanto elemental,porque de todas maneras"su" problema era un
problemasocial. Este distinguir de un lado la esferapersonal y de otro la
esferasocial es una manera incorrecta de plantearseel conocimiento de su
propia situción.
De El hilo roio sólo cabe destacarla contradicción que supone dar como
poemasde ideologíamarxistaunos poemasque no lo eran (hablo descriptivamente),ya que algunos textos poéticos de los años cuarenta que incluye en
estaantologíafueron escritosen la misma época que un significativo artículo
suyo,"[Jn fantasma recotre Europa" (30), donde se manifiesta en contra de
estefantasmaman(ista.Por otra parte,el hecho de que reúna aquí estospoemasde los años cuarentajunto a otros poemas típicamentesocialesde los
años cincuenta y siguientestiene un sentido: ei de considerarlospoemas
sociales,
con lo que muestraque la basede la poesíasocial va más allá de la
ideologíamarxista:la existencialista.Hemos de entender,por otra parte, que
GabrielCelayahabla del marxismo en tanto ideologíay en ningún momento
como instrumento teórico.
El hecho de que hable en la carta dirigida a quien esto escribede su afinidad de "temperamento" con los bensolarisy el hecho asimismo de que destaquetres rasgosconcretos que actúan en su obra como consecuenciade esta
ahnidad,supone dar por exactasu creenciaen la existenciade una esencia
que caracteizana al pueblo vasco, aun sin que alguno de sus integrantes
poseyerael conocimiento de la lengua vasca, como es el caso del propio
Celaya.Así, servascova más allá de lo propiamentelingüístico(estasideasya
lasexpresaen su entrevistacon JoséMiguel Ullán, publicada en El Adelanto
de Salamanca,el 17 de marzo de 1966).Por otra parte, las reflexionesque
aquí expone nos ofrecen luz sobre la técnica creadora de Celaya: trabaja el
poema,corrige el primer brote, sin llegar a obturar la espontaneidad del
mismo.Lo curioso de estasafrrmacioneses que considereestosrasgoscon un
criterioestéticomás que el criterio de la eficacia que tan incesantementeviene
propugnandodesdehace años,cuando afirma que sus afinidadescon los bensolarisno son muy halagadoras.
Del prólogo a Memoriasinmemorialesdestacala coincidencia de planteamientospor lo que respectaa su teoría de la función poética, a propósito
ahora de un texto en prosa. Me refiero concretamentea sus afirmaciones
sobrela importancia que da al sentido de los hechos biográficos, a los que
desconsidera
como tales hechos pretendiendoencontrar el sentido que los
trasciende.La trascendencia,recordemos,a que somete al hombre-poeta es
cualitativamentela misma que atribuye a estasmemorias,que no simple bio-
(30) La Voz de España, San Sebastián,2Ode octubre de 1948.
384
ANTONIO CHICHARRO CHAMORRO
grafía. E,stamanera de proceder contradice la que acabamos de ver en el prólogo de De claro en claro y en su "Nota" a Les cartqs boca arriba, donde las
circunstancias biográficas cobran una importancia en él teóricamente desconocida, siendo utilizadas éstas para explicar el desarrollo y la lógica interna
de sus libros mencionados.
Tras este repaso por sus publicaciones, donde Gabriel Celaya sienta a
Gabriel Celaya en una especie de banquillo-confesionario, no está de más
manifestar que la visión que de él posee no es desacertada. Las etapas que
atribuye a su quehacer poético están bien sustentadas, aunque no olvidemos
el carácter de reconocimientoque sus análisis suponen. El ha vivido unas circunstancias y ha atravesado por unas posiciones ideológicas que globalmente
reconoce, pero sin saber distinguir hasta dónde llegan unas y otras e incluso
si alguna de ellas desaparece o se absorbe en otra lógica distinta. Así, su existencialismo no es una etapa más, sino que está presente en su quehacer procurando el nacimiento de la poesía social. Su marxismo no es sino una
ideología penetrada por otras ideologías ajenas al mismo. Y así podríamos
seguir sucesivamente. Aceptemos, con valor deíctico, sus informaciones y los
resultados de sus reflexiones críticas, pero sin tomarlas con la validez que se
le suele suponer comúnmente.
Por otra parte, comprender el sentido de las etapas ideológico-estéticaspor
las que ha atravesado es comprender de alguna manera y en tanto síntoma el
desarrollo del nivel ideológico de nuestra sociedad en un período histórico
determinado. Por eso, cuando hablamos, y ello es obvio, de su etapa surrealista o de su compromiso social o de la crisis en que se hunde en los años
sesentay siguientes, estamos hablando de algo colectivo que, calándolo, atraviesa la figura de Gabriel Celaya.
Finalmente, como testimonio de la incansable lucha que mantiene Celaya
entre la realidad, su compromiso y los fantasmas que lo acosan, además de
por ser un claro síntoma de su honestidad, voy a citarles unas palabras de su
introducción a Itinerqrio poético, donde se muestra sin trascendencia alguna:
"Cuando uno llega a mi edad resulta difícil superar ciertas desilusiones. Y
aun cuando uno cree que explica quizá no haga más que racionalizar fallos
vitales. No obstante puede que eso sea más honesto que explotar posiciones
adquiridas" (p. 30). Estamos en Ia "razón narrativa" de. la "razón narrativa"
un momento oportuno para cerrar el trabajo, precisamente cuando Celaya
parece iniciar el metalenguaje del metalenguaje del lenguaje literario, esto es,
cuando comienza a justificar ideológicamente las ideologías que lo han constituido.
Antonio Chichano Chamorro
Universidad de Granada
CELAYA SOBRE CELAYA
38s
Post Scriptum
Redactadoel presentetrabajo aparece una nueva publicación de nuestro poeta
vasco,Refletciones
sobre mi poesía (Madrid, Escuela Universitaria de Formación del
Profesorado
de E.G.B."Santa Maria", UniversidadAutónoma, 1987),en la que el poeta
welvea mirarsea sí mismo. Ahora bien, nada de lo que afirma contradicelo anteriormenteexpuestoacercade sus etapasy de su pennanentedeseode alcanzarun estado
deconciencia
que rompa la concienciacerradadel yo individual. De cualquierforma,
Celayaintroduce una nueva denominación para su última etapa,que en los trabajos
üstosmás arriba ha llamado "poesíapersonal".Ahora habla de su "poesíaórfrca", lo
queempezóa hacer ya en su prólogo, "Hacia una poesía órftca", a su libro Penúltimos
poemas
(Barcelona,Seix-Barral, 1982).En dos palabras: Celaya teonza sobre la concienciaexpandidatranspersonaly cósmica.La poesíaórfica es poesíacolectiva destinadaal otro a través de la cosa-poemaen la que el poeta expresasu yo en la medida
enqueesprototípico y tiende a lo cósmico.El viejo Celaya debatenuevamente,como
vemos,acercadel sentido y función de la poesíaque entregaa los demáscomo medio
de conocimientode 1o que es, según sus conocidos planteamientos expuestosya en
Inquisiciónde la poesía.