Fenati reivindica la presencia fija de Masiá en el Mundial
El italiano, al que el español le había pedido una foto el viernes, interrumpió su entrevista con AS para decir que se merece un puesto en la parrilla de Moto3.
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Jaume Masiá dejó el sello en su carrera de debut en el Mundial mucho más allá de su noveno puesto final. El chaval de 16 años arrancaba decimocuarto y llegó a rodar segundo, convirtiéndose en uno de los grandes alicientes sobre el asfalto del Red Bull Ring. No le cabía la sonrisa después en su rostro cuando le estaba relatando a AS su actuación en el box del Platinum Bay y le interrumpió Romano Fenati, al que tenía como vecino de box. El italiano no venía a recriminarle nada sino a felicitarle por su actuación y para reivindicar que se hiciera fuerza para verle la próxima temporada en la parrilla de Moto3.
“La verdad es que sí, que esto es dejar el sello. Ha sido una carrera emocionante y he aprendido mucho de estos pilotos”, estaba comentando el valenciano de Algemesí cuando Fenati, que había sido decimotercero, se acercó hasta él con la mano tendida para decirle: “¡Bravo! ¡Enhorabuena!”. Y a continuación, se giró hacia servidor y me dijo: “Es grande, muy grande. Es una injusticia que no tenga moto para el año que viene. Espero que esta carrera le abra la puerta del Mundial. Él tiene que estar aquí cuanto antes. A ver si hay un equipo que lo ficha”. En ello está su representante, Albert Valera, el de Lorenzo, Aleix y Martín.
Tras esa interrupción que nos puso la carne de gallina, Masiá siguió con sus declaraciones, con una sonrisa aún más grande que la que ya tenía antes. “Hace dos días le pedí a Fenati que se hiciera una foto conmigo y ahora me dice esto. Es emocionante”, dijo entre risas antes de volver a su carrera: “Me he visto fuerte, con ganas y me he dicho que había que dar un empujón más. Quería llegar a Mir, pero él iba muy fuerte y el resto de rivales también, porque no perdonan nada”.
Al preguntarle qué es lo que más aprendió de una lección como la que le ha brindado el GP de Austria, asegura: “A adelantar, a batallar, a echarle valor, a saber aguantar la posición cuando toca, pero he pecado de inmadurez y de querer más de lo que tenía que ser. Me quedo un poco insatisfecho por mí, porque he fallado cuando he estado delante”.
Y respecto a su futuro: “Este mundo es muy difícil, pero espero que esta actuación sea un trampolín. He demostrado de lo que soy capaz y ojalá me sirva para estar aquí el año que viene. Voy a Silverstone también como sustituto de Binder, que sigue lesionado. Aquí me habían pedido que la moto volviera al box y así ha sido en todas las tandas y en la carrera”. Masiá es el cuarto de la general del FIM CEV Repsol, el Mundial Júnior de Moto3, pero será recordado ya para siempre por su espectacular debut en el Mundial absoluto de la categoría. Apunten su nombre.