Abstract
Escribir hoy en día un libro sobre hermenéutica, que tal hermenéutica se refiera a la desarrollada por G. Gadamer en su conocido Verdad y método y que se pretenda añadir algo nuevo a lo mucho escrito sobre el tema parecería, a primera vista, empresa irrealizable. Que ambas pretensiones inspiren la sólida monografía de María G. Navarro —titulada Interpretar
y argumentar— constituye empresa audaz y arriesgada, plena de coraje innovador, que provoca admiración, curiosidad e interés. Contra lo que pudiera parecer a primera vista, el libro contiene un alto componente de originalidad y creatividad, debido a la estratagema metodoló-gica de que se sirve la autora. A saber, una hermenéutica in obliquo, estrategia consistente en interpretar a la hermenéutica gadameriana a través del prisma de la lógica de la argumentación.