Tiburones equipados con cámaras, claves en el descubrimiento de la mayor pradera acuática conocida Los tiburones tigre elegidos por los científicos para portar sensores de geolocalización y una cámara de 360 grados no conocían su misión, pero los datos que recogieron han resultado vitales en la investigación liderada por Beneath the Waves, ONG estadounidense que lucha por la conservación de los océanos. La asociación entre científicos y escualos ha permitido descubrir la mayor pradera de pastos marinos detectada hasta el momento en el mundo. Está en las Bahamas y ocupa 92.000 kilómetros cuadrados, una superficie similar a Andalucía. Estas praderas son imprescindibles para capturar carbono, el principal gas de efecto invernadero; como hábitats de especies marinas ―numerosas pesquerías dependen de ellas― y como defensores de las costas frente a la erosión, las tormentas y tsunamis. El mayor peligro en la actualidad son las anclas de los grandes yates que se acumulan en la zona, sobre todo en invierno, como ocurre en España en verano con las praderas de posidonia en Baleares. El éxito del método abre la posibilidad de utilizar a grandes animales marinos para explorar el océano.